Cualquier cosa tangible que te puedas imaginar navega en buques de carga de una punta a otra del mundo a diario en todos sus estados: líquido, sólido y gaseoso.
No importa si la mercancía son productos de clientes o de alguien que se muda de país, lo que está claro es que toda carga debe llegar a destino en buen estado, por ello es igual de importante el embalaje en todos los casos.
Para que la carga llegue en buenas condiciones, hay que protegerla adecuadamente teniendo en cuenta las situaciones a las que puede verse expuesta durante el trayecto y todos los procesos a los que se somete durante su tránsito. Pues nadie desea que su mercancía llegue dañada a destino y no poder reclamar al seguro por no haberla embalado de forma adecuada.
¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de preparar el embalaje de nuestra carga?
Son muchos los factores que influyen en la carga durante todo el trayecto y hay que valorar cada uno de ellos detenidamente para elegir la mejor opción de protección, estos son los más importantes:
- Las condiciones climatológicas como la humedad y salinidad que pueden provocaroxidación y corrosión.
- Las temperaturas extremas que puede sufrir el bulto durante el trayecto, tanto de frío como de calor, tiene que estar bien aislada en estos casos.
- La contaminación que deben evitar los productos como los alimentos para no alterar las cualidades de los mismos.
- Los movimientos bruscos de la carga que pueden producir las grúas en las operaciones de carga y descarga.
Una vez analizado lo anterior y teniendo en cuenta que la mercancía debe ser transportada en contenedores, cabe hablar de las opciones que hay para proteger la carga en el interior de los mismos:
- Los sistemas de fijación como las cintas de amarre, air bags, cables de acero, soportes de madera, etc…inmovilizan la carga en el interior del container.
- El aluminio VCI y las sales desecantes hacen de materiales barrera y antihumedad para evitar las corrosiones, moho y desperfectos ocasionados por el exceso de humedad.
- Los aislantes isotérmicos resguardan los productos y mercancías de los cambios de temperatura sin la necesidad de utilizar contenedores especiales.
- Los contenedores para líquidos y graneles son recipientes antisépticos y seguros para el transporte de líquidos y graneles que aseguran su aislamiento y evitan el contacto del producto con otras sustancias, como big bags, liners, flexitank, etc.
¿Qué función tienen las etiquetas?
Por otro lado están las etiquetas, pues son muy importantes ya que las personas que manipulan la mercancía no saben con qué producto están tratando. Así que se debe indicarse con detalle, en todas las caras visibles del bulto, la forma en la que tratar la carga para que el palé se gestione de manera adecuada y con cuidado (“hacia arriba”, “frágil”, “no apilar”, etc…)
¿Cuáles son los errores más comunes a la hora de embalar?
A pesar de lo anterior, hay factores externos que no se pueden controlar pero si partimos de un embalaje adecuado para cada mercancía, podremos reclamar en caso de desperfectos. Por tanto, un buen embalaje implica que la carga no sobresalga del embalaje o que las cajas estén mal apiladas por ejemplo. Algunos errores son:
- Cargar demasiado peso en el mismo palé
- Colocar cargas demasiado grandes en palés.
- Apilar mercancías que no deben ser apiladas
- Cargar cajas en palés sin envolturas retráctiles o cualquier otro tipo de material que las asegure.
Por tanto, con todo lo anterior, podemos concluir que hay que tener en cuenta cualquier aspecto que potencialmente pueda afectar a la carga para asegurarse de que esta llega perfecta a su destino y hacer un esfuerzo adicional a la hora de embalar la mercancía, para utilizar el material más adecuado. Para mercancías muy caras o frágiles, hay que invertir más embalaje y, si es necesario, contratar una empresa especializada en servicios de embalaje profesional.
El equipo de Transglory